La Escena Hardcore, este 10 de noviembre de 2006, dio un gran paso con lo que sería el concierto de mayor importancia de toda su historia.
Este colectivo -conformado por las bandas Descomunal y Colapso-, durante este año, ha logrado realizar más de un concierto cada trimestre y reunir a bandas de Italia, Ecuador, Brasil y México. El Ecuador Tattoo & Music Feria Underground fue el cierre de toda su esforzada campaña 2006.
Con un retraso aproximado de una hora, el concierto se dio por iniciado. La participación de tatuadores, diseñadores, y tiendas especializadas hicieron de este festival una vitrina para varias obras y trabajos de las personas que conforman la cultura underground.
Colapso fue la primera banda en escenario. Con un demo a su haber y varias presentaciones durante todo el 2006, la agrupación quiteña ha logrando irrumpir en la escena del metal extremo como también en la del metalcore.
Con un adecuado recibimiento por parte del público, Colapso logró comunicar su propuesta que tiende claramente al death metal melódico, pero -como lo transmitió a los asistentes- su influencia hardcore se representa en el estilo de vida que llevan y su forma de proceder: donde la hermandad y el hazlo tu mismo son las políticas básicas de su trabajo.
A continuación desde Ambato llegó al escenario una agrupación que durante toda su trayectoria ha reinventado su sonido. Cafetera Sub supo presentar su actual trabajo, en el cual temas como ‘Escupo cristales’ o ‘Necrósfera’ destacaron. El punto más alto de su performance se dio con un nuevo tema que tenía como invitados a Julio Valle –guitarra- y Chespy -voz- de la agrupación Mortero. Los vocalistas de ambas bandas lograron poner en el tapete su dominio gutural de la mejor manera.
Luego, los primeros invitados internacionales hacían su aparición. La banda colombiana Estado de Coma -con su actitud hardcore y su estilo bastante callejero- logró despertar gran atracción ante el público local que la apoyó. Sus tres vocalistas realizaron un buen rol y tuvieron dominio en el escenario.
Después de una pequeña demora, Gustavo Dueñas, vocalista de la banda Descomunal, anunció que por motivos de fuerza mayor (racionamiento de energía del sector), el concierto podría ser interrumpido luego de la medianoche, motivo que impulsó a tomar la resolución de cambiar el orden de las bandas. A continuación iría Madball.
La aparición de la banda no se hizo esperar. Los cuatro representantes del hardcore neoyorquino demostraron, entre otras cosas, una entrega absoluta. Fred Cricien, vocalista de Madball de origen latino, logró mantener una comunicación directa con el público. En un inicio presentaron a cada integrante de la banda y destacaron el papel del bajista ecuatoriano Hoya Roc, quien se robó la mayor cantidad de aplausos de la noche. Madball recorrió temas de sus seis producciones discográficas, y dio mayor importancia a temas pertenecientes a su último trabajo Legacy, como lo fueron ‘For my enemies’ o ‘Heavenhell’.
La trascendencia de esta presentación llevó a convertirse en un ejemplo, tanto de actitud en escenario como de humildad y fuerza, elementos que acompañaron toda la actuación de la banda.
Luego de aproximadamente una hora y media de concierto, Madball se despidió con sus temas dedicados a su público ‘Para mi gente’ y ‘Nuestra familia’. Al terminar la presentación de la banda neoyorquina, la mayoría del público abandonó el lugar.
Con el tiempo limitado, subieron al escenario los dos referentes hardcore más conocidos de nuestro país. Luis Cordovez, vocalista de la banda Muscaria, y Gustavo Dueñas. Ambos por segunda ocasión compartían escenario (la primera vez fue en la plaza Belmonte hace varios años, donde Luiggi fue invitado a cantar el tema ‘Animal’ de la agrupación Misil) para concertar cuál sería la banda que continuaría con el evento.
La suerte del cara o cruz determinó que Descomunal sería el próximo en escena. Con tres temas de su EP De oscuro final y un tema de su demo Instinto, Descomunal supo rendirle cuentas al público que los esperó para verlos. Con una excelente presentación en vivo y la honrosa sensación de tener a Madball como público, Descomunal se despidió.
Al finalizar esta gran noche, Muscaria presentó a su actual baterista y tocó los últimos cuatro temas que cerraron el telón de la ceremonia donde el metal y el hardcore fueron los principales protagonistas.
Por: X