La agrupación que implantó la electrónica de vanguardia en el país habló con Plan Arteria. Sus creadores Cesar Padilla y Pablo Valencia repasan la trayectoria de F.415: Inicios, producciones, difusión y futuro.
La masividad no les devolvió la mirada. Pero eso no importó, con el paso del tiempo encontraron la originalidad. Empezaron con la idea de formar una típica banda de rock; luego de experimentar con sintetizadores y diferentes beats descubrieron un camino por el que viajarían por más de siete años. Si estabas buscando una banda de culto dentro de la escena independiente ecuatoriana, quizás este sea tu momento de descubrirla, empecemos por la primera pista: su nombre es F.415.
¿Cómo empezó F.415?
Cesar: Los inicios fueron como una banda común, con guitarra, bajo, batería inclusive hicimos una audición para encontrar una cantante mujer. De ahí las cosas se dieron para hacer música electrónica, no fue pensado. Alguna vez experimentamos con un sintetizador, de ahí pusimos baterías electrónicas y nos gustó. Pablo tocaba el bajo pero le metíamos distorsión, las voces igual con distorsión y todo lo demás era electrónico. Fuimos cogiéndole el gusto a este tipo de equipos electrónicos, hasta ahora. Somos reacios, si es que vale el término, a realizar música a partir de una computadora, por medio de un software, sino nos enfocamos mucho más en lo que es hardware electrónico, porque le mete mucho más feeling. Para nosotros mover una perrilla es como tocar una guitarra.
En los primeros años de F.415, ¿encontraron algún grupo que experimentaba con sonidos electrónicos dentro de la escena musical ecuatoriana?
Pablo: Realmente no había. Nuestra idea era formar un grupo que suene diferente, obviamente teníamos bases electrónicas, pero no sabíamos realmente como hacían esa música, poco a poco por medio de investigación autodidactica fuimos descubriendo que los equipos electrónicos te pueden conducir a ser un productor y a tener una banda tu solo. Dentro de la escena ecuatoriana habíamos escuchado de Pinteiro, le vimos en una presentación en la plaza Belmonte, nos pareció interesante, pero no era como que nos atraía, como: «eso queremos hacer», el sonido nuestro se fue dando por necesidad.
¿Creen que ha existido una evolución dentro de la música electrónica dentro de nuestro país?
Cesar: Si, bastante, a través del myspace te das cuenta que hay más gente, inclusive antes encontrar equipos como los nuestros era difícil, ahora ves grupos que ya tienen equipos bien parecidos a los nuestros, grupos que han tenido la misma trayectoria que nosotros: generando música primero con el bajo y sintetizador.
Encontrar música de F.415 resulta bastante complicado, ¿cuáles son los discos que F.415 ha editado hasta el momento?
Cesar: Hemos sacado discos a un nivel más personal, pero no comercial. El primer disco lo sacamos en el 2004, se llamaba “Echelon”. En este Pablo tocaba el bajo, había pocas canciones cantadas y era música súper experimental, más chill out aunque también tenía algo de rock. Luego en el 2005 sacamos un Ep: “Pain is Good”, que tenía solo 6 canciones, experimentamos bastantísimo en todo, lo que era escribir letras y buscar un estilo para cantar. Luego de eso sacamos “=equipment + creativity” en el 2007, la producción es mucho más profesional, mucho más compleja y un poco menos experimental. Cada uno de los discos que hemos hecho son totalmente diferentes, no hay ninguna canción que se parezca la una a la otra. Ahora estamos trabajando en el nuevo disco, tenemos 5 canciones más o menos hechas.
Canciones como Bailecito Boliviano, del primer disco son temas mucho más relajados, ¿por qué con el tiempo la banda mostró composiciones mucho más densas y experimentales? ¿Fue un proceso inconsciente o totalmente pensado el que suceda así?
Cesar: Siempre tuvimos una especie de posición política sobre las cosas y las situaciones en general de la sociedad, en eso también se basan las letras que nosotros hacemos, son letras súper criticas en diferentes aspectos y la música comenzó a ser mucho más fuerte, más rockera, pesada por así decirlo, igual la forma de cantar es súper agresiva, pero nos parece original y chévere. Personalmente pienso que el sonido que tenemos nosotros en la actualidad se ha vuelto algo único, incluso ante bandas del exterior que pueda que tengan algunas cosas similares, pero no va a ser lo mismo.
F.415 es una agrupación que en general no ha tenido mucha difusión, ¿a qué se debe esto?
P: Nosotros hemos tenido varios problemas con los medios, creo que hay un rechazo a veces por parte de ellos. Por ejemplo una vez tuvimos esas presentaciones de “Mis bandas nacionales”, nos llamaron para decir que ganamos un premio y que vamos a tocar ese día, por lo mismo llevamos los equipos, alquilamos un parqueadero desde las 2 de la tarde en el centro, después, se acabo el show, toco Fausto Miño y nunca tocamos. El segundo año en esos mismos premios nos pasó la misma cosa, nos dejaron a un lado completamente. Entonces no es que nosotros tengamos ira contra ese medio de comunicación, pero tampoco es que vamos a estar rogando para que nos pongan la música. No es que seamos reacios a unirnos a ese medio, pero si los manes se portan así, ese en especial el de la Nebraska Chiriboga se porta así, entonces no está bien.
C: Para nosotros se ha vuelto más chévere hacer este tipo de cosas con entidades más underground, y no con radios famosas o radios en donde toca todo el mundo, o sea no quiero decir que sea mal grupo, pero si en una radio ponen Papa Chango y ponen nuestra música, prefiero que pongan un grupo totalmente desconocido y de ahí nuestra canción, es mejor, porque te diriges a un grupo de gente que aprecia mucho más tu trabajo.
P: Siempre va a haber esa jerarquía de los grupos que venden más. Nunca va a existir un respecto a los pequeños grupos como el nuestro, ya que no hay ganancia, obviamente.
Han pensado aprovechar las nuevas tecnologías en beneficio de que la banda sea más reconocida.
P: Estamos tratando siempre de conseguir conciertos en otros lados, a través de eso hemos ido a Colombia unas cuatro veces, si ayuda bastante la tecnología, pero no es al 100%, todavía no somos tan conocidos aquí y creo que también se necesita ese peso nacional para que te inviten a otros lados.
¿Qué tal fue la experiencia de tocar en los festivales de música independiente más grandes del país: Festival FFF y Quitofest?
C: Fue súper chévere, en esa época nosotros estábamos empezando a tocar en esos escenarios, ya que una época pasamos tocando en bares y discotecas, pero a partir de que tocamos en la Fiesta de la Música de la Alianza Francesa, hubo un lapso hasta que empezamos a tocar en estos festivales como el Quitofest que fue en el 2006 y el Festival FFF que fue en el 2005.
P: Pero creo que más que los festivales para nosotros el mejor concierto se trata de ver dónde está el mayor grupo de gente que le gusta nuestra música, que este prendida, el Quitofest si fue eso, pero todavía recuerdo conciertos de inicios en lugares que se daban donde nadie nos conocía, absolutamente nadie, y terminábamos siendo el mejor grupo.
C: Las experiencias en general son así, yo me acuerdo que una vez tocamos en las fiestas de Guapulo, en una tarima después de las típicas orquestas que se presentan en Guapulo con trompetas y todo, y era intimidante porque era algo totalmente distinto, imagínate tocar después de una de esas bandas ante un público que no sabes cómo va a reaccionar, esa ves llevamos discos que teníamos copiados caseramente. Fue increíble porque ni bien acabamos de tocar vendimos todos los discos, la gente seguía pidiendo y ya no teníamos más discos, fue una de las experiencias más chéveres, fue como dice Pablo, no es el concierto más grande pero ver la reacción de la gente es lo más chévere que puede haber.
¿Qué tienen pensando realizar para el 2010?
C: Estamos planeando para el 2010 aplicar a todos los conciertos y festivales grandes que hayan, ya no importa si toca mandar discos, hablar con la gente que toque hablar, pero tenemos que empezar a hacer que la gente escuche lo que en verdad se está haciendo aquí. Si bien todos los grupos dicen esto, pero en verdad creo que somos buenos, somos diferentes, una alternativa totalmente distinta a lo que se está haciendo aquí, por más grupos electrónicos que están apareciendo en todo lado, yo pienso que nadie se va a comparar con el sonido que tenemos.
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Por: Darío Granja / Fotos: Alvaro Valencia Yépez