Esta semana, en otro medio, me tocó escribir sobre una artista que se retira del mundo del espectáculo, las luces y las tarimas, su nombre: Paloma San Basilio.
Mientras escribía no podía dejar de pensar que, para sus fans, el anuncio de su despedida debió ser como cuando Michael Stipe en su página web puso «no va más REM» (bueno, exactamente no lo dijo con esas palabras). A mí me llegó esa noticia cual niño al escuchar a sus padres que se van a divorciar… ¡Desolador!
REM, la primera banda que me inspiró a grabar un casete con canciones de la radio. ‘Losing my religion’ fue mi primer tema, lo recuerdo como si fuera hace 22 años… Yo, un niño de 9, estaba sentado frente a la radiograbadora (aparato casi tan extinto como el rinoceronte negro) e inmediatamente, luego del anuncio del locutor, coloqué aquel casete de 90 minutos, presioné el botón de ‘pause’ al mismo tiempo que el de ‘record’ -una vieja técnica que ahora talvez pocos entiendan- la voz del presentador calló y enseguida solté el ‘pause’ para empezar a grabar de forma impecable 4 minutos con 28 segundos del ‘hit’ de la temporada, salido de aquella obra de arte llamada ‘Out of time’.
Dos décadas más tarde REM se separaría, aquella banda que inspiró tantas bandas, aquel líder, Michael Stipe, amigo de tantos músicos, casi un terapeuta de ellos, ya no se subiría al escenario junto con sus amigos Peter Buck y Mike Mills, menos aún con el baterista Bill Berry, quien dejaría el grupo en el 97’.
Y así se fueron, sin giras de despedida ni nada, ellos declararon que lo habían decidido dos años antes, mientras tanto yo me quedé con las ganas de verlos en vivo, al menos los seguidores de Paloma San Basilio sí tendrán su tour de despedida.