Collage por Mariuxi «Diu» Fernández
Cuando se me vino la idea de escribir esto, pensé que el título perfecto sería Treintañeros que se quedaron en los 15, como está en la bio de Twitter de uno de los entrevistados. No fue así para nada: no hubieron lágrimas ni deseos de encontrarse con Zoltar de Quisiera ser grande para pedirle volver al glorioso pasado. Este es un chat vía Skype con Ramón «Moncho» Villacreses y Kevin Fernández, vocalistas de las bandas locales G.O.E y Diez80 y, a la vez, fundadores de la Unión Punk y Trucho Records, sellos autogestionados/grupos de panas que a finales de los 90 iniciaron una nueva movida punk en Guayaquil.
Cuenten cuántas veces decimos «bueno» y reclamen un premio.
Señores.
Ramón «Moncho» Villacreses: Acá debutando en Skype y con «internés» pirata porque se me murió el módem hoy.
Hablemos por mIRC. Bueno, Unión Punk [UP], Trucho Records: ¿cuánto tiempo tienen? ¿15 y 10 años? ¿Cómo empezó todo?
Kevin Fernández: 11. El Truchorama [compilatorio de Trucho Records] salió al año de creados [saquen sus calculadoras, lectores].
RV: ¿Te pasé el mega [archivo en formato] Word de 30 hojas? Ahí ‘ta todo, pero veamos… Bueno, lo contaré desde mi perspectiva. En 1994, Juan Pablo [Cornejo] de Agente 86 [banda formada en 1996, de las primeras en hacer ska en la ciudad], «El Indio» [Christian Freire, bajista de G.O.E] y yo éramos vecinos del barrio del Seguro [al sur de Guayaquil]. No vivíamos pegados, pero sí en la misma «shooona» [o sea, zona]. A mí no me caía bien «El Indio» para nada, pero me había hecho pana de Juan Pablo porque tenía Mortal Kombat en Super Nintendo. El man nos prestaba juegos bacanes. Así, empezamos a pelotear en la calle, etcétera. Este man [Juan Pablo], ese año ’94, empezó a juntarse con «El Indio». Yo solo escuchaba radio y lo que salía en MTV. No sabía ni que era punk, de eso me enteré porque Juan Pablo y «El Indio» escuchaban durísimo Green Day y Offspring. Me hicieron escuchar el Dookie y, tal cual la portada, se me voló la maceta. Ahí ya me empecé a hacer «bodi» de «El Indio». Esto lo cito porque «El Indio», Juan Pablo y yo íbamos a hacer una banda. A finales del ’94 ya estaba la idea, y hubo «ensayo» en el ’95. Tres guitarristas acústicos, claro. Por ahí hay un cassette de una versión de «Ya no sos igual» [de 2 Minutos], con letra cambiada. Nos pusimos Mi Chopercita…
Qué horrible ese nombre.
RV: …porque lo grabamos en la bodega de mi abuela, en el barrio del Seguro, donde habían viejas bicis Chopper. Realmente jamás hubo banda.
KF: Puta, Chopercita, banda acústica punk. Sería un hit ahora.
RV: La cosa es que «El Indio» y yo quisimos seguir con la idea de una banda y seguimos escuchando punk porque nos veíamos en el colegio, ambos en el Javier, en la misma «promo» 38. Todos por nuestro lado sacábamos ya NOFX, Rancid, etcétera; ya pa’l ’96 la colección punk había crecido en CD.
Juan nos dijo, «ya tengo banda»; nos quedamos pateados y tan posers que con «El Indio» nos inventamos banda ficticia. Bueno, este preámbulo lo pongo porque siento que por ahí nació la UP, sin querer queriendo, porque Agente fue como un vínculo entre 69 segundos [«pioneros del hardcore melódico en el Ecuador», según su Twitter] y nosotros [G.O.E].
¿Y dónde estaba el resto? Digo, ¿cómo se conocieron todos?
RV: Nosotros por el sur y por el norte Mario Jácome y Andrés «El Chivo» Jiménez [de Agente 86] se hicieron panas de Iván [Casanova] y Andrés Peña, primer primera guitarra [ambos de 69 segundos].
Recuerdo que una amiga llevó al colegio una página entera de La Onda donde hablaban de Agente 86.
RV: La cosa es que Agente tocaba solito y después de su debut en el ’96, habrán tocado unas dos o tres veces más, una de esas en Bellavista [una ciudadela al norte de Guayaquil], por febrero del ’98. Ahí fuimos con los que seríamos G.O.E y ya estaba Iván dándose medias lunas, «pogueando» solo. Lo bautizaron como «El Manicho».
Nosotros queríamos debutar, entonces quisimos armar un show con Agente pa’ que vaya la gente de los «manes». Eso en mayo ’98. Entre los dos grupos juntamos equipos y fue tan pero tan «bochorno» [el concierto], que Kevin Dickens [exintegrante de G.O.E y Rek] se le jaló los parlantes del equipo de sonido de la vieja pa’ la voz.
La cosa es que los agentes nos pidieron que le demos chance a 69 pa’ que abra y ellos abrieron el Monsters of Punk 1. Ese día fueron un gajo de panas que después hicieron bandas: Thomas [Maldonado, vocalista y bajista de Rek], «Cheche» de Potato Head Punks, Alfredo de Armada de Juguete, y así. Se sumaron Komo la Tusa y Moral Abajo. Hubieron unas dos o tres tocadas más, hasta que a Iván se le ocurrió hacer el Unión Punk 1, metiendo a todas las bandas punk que conocía, por eso hasta Notoken estuvo en volante. [El nombre del concierto] lo puso «El Chivo», en alusión a Union 13 [banda gringa].
Thomas alguna vez contó la historia del nombre de 69 segundos; no sé si será paro o algo, pero en todo caso decía que se llamaban así porque estaban viendo porno, se habían metido a un anuncio que decía LESBIANAS EN 69 y, de repente, se cayó el internet [seguramente alguien alzó o llamó al teléfono] y alguien dijo «Psss… ¿Qué 69? 69 segundos ha de ser».
RV: Yo cuando los conocí ya eran 69 segundos… Sé que Iván algún rato le puso Lentes Rotos.
Ya digan la plena, ¿escuchaban Bon Jovi?
RV: Empecé siendo popero: full Michael Jackson, Hombres G, Cyndi Lauper, Billy Idol, todo lo que salía en El show de Bernard… También Poison, Quiet Riot, Bon Jovi y más. Después fue que Cobain me devolvió la decencia. Cuando sentó calavera Kurt es que casi un par de meses después me hice punkero pan de dulce, como hasta ahora.
KF: [Uno] de mis primeros discos fue el Master of Puppets porque no había el disco negro de Metallica y pensé que sería lo mismo, y de ahí Gerardo y Vanilla Ice.
Mi primer disco fue el de Haddaway, el de «What Is Love».
KF: Nirvana, Green Day y Offspring lograron que dejara todo.
RV: Después del Big Ones de Aerosmith me compré el Dookie y de ahí casi que solo compro discos punk.
Kevin y Moncho, los dos estaban metidos en el punk: ¿no se conocían? ¿No coincidieron en esos primeros conciertos?
RV: Pucha, yo era fan de «Don Kerwin» [apodo de Kevin], por Lapsus Brutus [un programa de televisión conducido por Kevin a finales de los 90]. El glorioso TV+ [extinto canal guayaquileño de señal UHF] que acompaña esas épocas de Mi Chopercita. [Ahí pasaban] Adrenalina, de David Flor, el único programa que ponía Rancid.
KF: Yo fui a un concierto de la UP para hacer un deber para el ITV [instituto donde Kevin se graduó]. Entrevisté a «Negricio» [bajista de Komo la Tusa], Mario, «El Indio» y vi en vivo a G.O.E. Si no me equivoco, esa fue la despedida de «El Marciano». SK-Van era Less Than Zero y cuando estaba editando me llamaron a que les cambie el nombre a Duff. Komo la Tusa se demoró 3 horas en empezar el show mientras prestaban los equipos, pero cuando empezó me quedé como loco porque la gente se sabía las canciones.
Luego fui a otro show, vi a Moral Abajo y nos botaron.
RV: Ah sí, «porque ese chico insultaba». Era la eterna cantaleta con Moral Abajo.
¿No se les pasó por la cabeza comprarse una gorra roja y hacer «nu metal»? Hello, era 1998.
RV: Yo ni escuché nunca Korn y casi nada de Deftones. Eso llegó cuando tenía demasiado punk por escuchar.
KF: Antes de Diez80, tocábamos algo así como Deftones, Rage Against The Machine, con letras idiotas. Yo era pésimo guitarrista y para hacer Deftones tienes que saber más de tres notas. Ahora no soy tan pésimo, ya sé cuatro notas.
Diez80.
KF: Los Diez80, Joseph [Larrea, vocalista y guitarrista] y «Jandaru» [Alejandro Corpeño, baterista] ya tenían canciones hechas, tenía solo que aprendérmelas. Joseph y Alejandro formaron la banda pero necesitaban bajo y segunda guitarra. Los de Stillborn [su primera banda] eran demasiado virtuosos para lo que ellos querían. [Joseph y Alejandro decían:] «Tocan demasiado bien. La verga, necesitamos algo no tan bueno».
Eso es lo que me gusta del punk: yo no soy virtuoso pero me identifico con lo simple y con las ganas de hacer música que otros puedan tocar. Creo que esa fue la idea en la que todos coincidimos.
Joseph sabía de la existencia de la UP y yo les dije «claro, hice un reportaje».
Entonces la UP y Trucho nacen de todas estas tocadas. A la final todos se conocían, ¿no?
RV: Ya para el 2000 creo que ya todos nos conocíamos, ya era una sola mazamorra.
KF: Vino Agente y nos invitó a un show. Mario dijo, «no es UP, es HardSkunk [sello de Mario, la suma de hardcore, ska y punk]»; compramos el Anarquía minúscula y ahí estaba el loguito y [para nosotros] fue como wow! Eso nos abrió los ojos. Entonces, cuando grabamos el Veneno [Veneno para ratas, su primera grabación] en cassette, pensamos en el nombre y «trucho» siempre estaba en nuestro léxico, así que fue decisión de un minuto. Trucho salió porque la UP era codiciada por todas las bandas y hasta que nos paren bola… Necesitábamos tener una disquera como Agente 86.
¿Creyeron que la escena iba a durar mucho tiempo?
RV: Bueno, los primeros años, todo era tan espontáneo: era como pa’ los peloteros pelotear, los skaters rodar… Éramos unos «punkeros» que no hacíamos otra cosa… Bueno, y de noche «alicorarnos» escuchando punk. La meta en común era lograr que se llenen los conciertos -no importaba si era por Agente, 69, No Hay Un Mañana o Punky Brewster– y «ojalá algún día hagamos un Warped Tour por todo el Ecuador».
KF: Es verdad, lo haces porque sí, sin pensar. Como banda, sabes lo bacán que es tocar frente a mucha gente y hacer que más bandas lo hagan, era parte del gusto.
¿Creen que con los años esa espontaneidad se diluyó? Les tienen que haber preguntado esto muchas veces, ¿pero por qué creen que la gente dejó de ir a los conciertos que ustedes organizaban?
RV: Por nuestro lado, definitivamente. La espontaneidad se convirtió en sinónimo de descuido. La cosa creció tanto que necesitábamos ser organizados.
¿Veían plata?
RV: Plata que tuvimos fue para pagar algo. Primero, consola: $1.600. Después, mics, pedestales, luces, etcétera. Plata que llegó era para pagar la deuda. Por ahí quedan una que otra entrevista [a G.O.E], y la típica pregunta: «¿planes a corto plazo?», y nosotros: «…pagar la deuda».
Eso sí, no perdíamos. Ya empezamos a perder con las bandas de afuera.
KF: Yo sí perdí dinero con el Truchorama. Se puso a $1 en Tower Records [tienda gringa de música en el centro comercial San Marino que, ¡sorpresa!, ya no existe]. Pedí demasiadas copias sin pensar. Perdí $2.000. El Truchorama costó, con todo, $3.000.
Creo que perdieron el dominio truchorecords.com
KF: Sí, perdimos el dominio. Ya eso es el inicio de nuestra agonía. Ya tengo más gastos y las redes sociales es donde la gente está.
Kevin, ¿alguna vez pensaste en dejar todo botado y ya?
KF: Siempre.
Pero… sacaste Truchorama II.
KF: Necio. Bueno, pero ahí ya teníamos algo más de dinero y auspicio. La gira ayudó, ya habíamos hecho el tour Muere Pirata Muere, nuestro intento de Warped.
¿Por qué creen que fracasaron los shows internacionales? Quizás fueron fracasos económicos; en otro sentido, fueron un avance gigante.
RV: [Fracasaron] sobretodo los del 2008. Ya no había la escena 2002-2006. No había ni la tercera parte [de gente que solía asistir] y nosotros jurábamos que esos eventos la iban a «resucitar». La gente dejó de ir bestialmente en el 2007, justo después de NOFX [G.O.E/Unión Punk los trajeron a Guayaquil en octubre de 2006].
Al mes de NOFX, habían 20 personas en un concierto en Mahalo [lo que, por cierto, me recuerda a un párrafo de The Dirt].
Y bueno, al día de hoy, ¿dirían que la UP y Trucho aún funcionan?
RV: Nosotros nos vimos obligados a parar, en la marcha. Quedamos solo G.O.E [al frente de la UP], con un saldo en contra de casi 15 lucas.
KF: Creo que es más que obvio que la escena punk es solo nosotros [UP, Trucho]. Mira el show de Lagwagon [vinieron a Guayaquil en junio. Estaban los mismos de siempre, según «Moncho» y Kevin].
RV: Tú vas a Kruger [bar guayaco inclinado al punk y hardcore] y esos manes [Zabandijas de la 18, Tony Montana, Enfermos, entre otros grupos locales] tienen una escena. Serán unos 20 gatos, pero son una escena de conciertos de todos los fines de semana.
Lo nuestro es un gran recuerdo. Yo espero cerrar la historia con la peli [el documental sobre la UP] y [trayendo a Ecuador a] Bad Religion, aunque está más que imposible. Con la UP hay gente que cree que [la escena] va a «renacer» y vamos a «rescatar el rock local», huevadas así. No jodas, la escena es ahora lo que es, pero fuera bueno hacer una despedida con la frente en alto…
KF: Eso es cierto, la escena es lo que hay.
RV: …no derrotados como con Comeback Kid [la banda canadiense vino a Guayaquil en 2008, poco después del show de Misfits], con menos de 70 personas.
La escena nunca muere. Sólo se transforma. Se deja crecer el pelo. Y la barba. Y se va a estudiar a Argentina.
¿Siguen escuchando Green Day?
RV: Siempre.
KF: La semana pasada desempolvé el Kerplunk.
Supongo que si los invade la nostalgia podrían ir a Archive.org y buscar cachés de las viejas webs de la UP y Trucho, ¿pero para qué recordar cuando el internet era lentísimo? «Moncho» está preparando el documental sobre la UP y aunque no hay un teaser ni fecha de estreno, el footage y las entrevistas están completas, con «una edición del 20%». Me imagino que lo veremos en 2015. Pueden leer más aquí. La página de la UP aún vive: unionpunk.com Por su parte, Trucho mantiene actividad en Twitter y Facebook, y, cada vez que Nebot y Correa se toman una cerveza juntos, suben una foto en Instagram.